Insecticida para plantas: diferencias entre insecticida sistémico y por contacto

Elegir el insecticida para plantas adecuado es clave para protegerlas de plagas, ya sea de tipo sistémico o por contacto

Mantener las plantas libres de plagas es esencial para garantizar su salud y crecimiento. Sin embargo, elegir el insecticida adecuado puede ser una tarea desafiante, especialmente cuando se trata de seleccionar entre un insecticida para plantas de tipo sistémico o por contacto. Ambos tipos de insecticidas tienen formas de actuar muy diferentes, y conocer las características de cada uno te ayudará a tomar la mejor decisión para proteger tus plantas. Hoy, te explicaremos en qué consisten estos dos tipos de insecticidas, cuándo es más adecuado utilizar cada uno y cómo pueden ayudar a mantener tus plantas en perfecto estado.

¿Qué es un insecticida sistémico?

Un insecticida sistémico es aquel que se aplica directamente sobre la planta (ya sea en el suelo, en las hojas o en las raíces) y es absorbido por los tejidos vegetales. Una vez absorbido, el insecticida viaja a través del sistema vascular de la planta, distribuyéndose por todas sus partes. Esto significa que el producto llega a las hojas, tallos, flores e incluso frutos, lo que protege a la planta de insectos que se alimentan de su savia o de sus tejidos.

Ventajas del insecticida sistémico

  • Eficacia prolongada: al estar presente en el interior de la planta, el insecticida sigue actuando durante un período más largo en comparación con otros métodos.

  • Protección completa: los insecticidas sistémicos protegen todas las partes de la planta, incluidas las que no han sido alcanzadas directamente por la aplicación.

  • Ideal para plagas difíciles de controlar: son efectivos contra plagas que se esconden o que se alimentan en lugares difíciles de alcanzar, como los insectos chupadores (pulgones, cochinillas, etc.).

Consideraciones al usar insecticidas por contacto

Dado que estos productos solo actúan donde se aplican, es necesario asegurarse de cubrir toda la superficie afectada. Además, su eficacia puede reducirse con la lluvia o el riego, ya que se eliminan al contacto con el agua.

¿Qué es un insecticida por contacto?

A diferencia de los sistémicos, los insecticidas por contacto deben aplicarse directamente sobre los insectos o sobre las zonas de la planta donde se encuentran las plagas. Este tipo de insecticida actúa de manera rápida cuando el insecto entra en contacto con él, eliminándolo de forma directa.

Ventajas del insecticida por contacto

  • Acción rápida: los insecticidas por contacto eliminan a las plagas de inmediato, lo que los convierte en una excelente opción para situaciones en las que se necesita una respuesta rápida.

  • Eficacia localizada: son muy útiles para controlar brotes localizados de plagas, ya que solo actúan en las áreas donde son aplicados.

  • Fácil aplicación: se aplican de forma sencilla mediante pulverización, lo que facilita su uso en plantas pequeñas o en áreas específicas.

Consideraciones al usar insecticidas sistémicos

Es importante tener en cuenta que estos productos requieren un tiempo para ser absorbidos y distribuidos por la planta, por lo que no son una solución de acción inmediata. Además, es necesario tener cuidado con su uso en plantas que producen alimentos, ya que la sustancia puede llegar a los frutos.

¿Cuándo usar insecticida sistémico o por contacto?

La decisión entre usar un insecticida sistémico o por contacto depende en gran medida del tipo de plaga, el grado de infestación y el tipo de planta que estés tratando. Aquí te damos algunas pautas generales para saber cuál utilizar:

Insecticida sistémico:

  1. Es la mejor opción para plagas que se alimentan del interior de la planta o que son difíciles de alcanzar, como los pulgones, moscas blancas, cochinillas y ácaros.
  2. Úsalo cuando se necesite una protección prolongada, especialmente en situaciones donde la infestación es recurrente o persistente.
  3. Ideal para plantas ornamentales y cultivos que requieren un control duradero sin la necesidad de aplicaciones constantes.

Insecticida por contacto:

  1. Es perfecto para brotes repentinos de plagas visibles, como orugas, escarabajos o mosquitos.
  2. Úsalo cuando necesites una acción rápida para detener una infestación que ya ha causado daño visible en las hojas o flores.
  3. Adecuado para situaciones en las que necesitas un control localizado y puedes ver claramente la zona afectada.

La elección entre un insecticida sistémico y uno por contacto depende de las características específicas de la plaga que estás enfrentando y de la forma en que prefieres manejar el control de plagas en tus plantas. Los insecticidas sistémicos ofrecen una protección interna duradera, mientras que los insecticidas por contacto proporcionan una acción rápida y efectiva para brotes repentinos.

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